Carmelita, el curioso modo de nombrar un color en Cuba, si no me equivoco somos el único país en el mundo que tiene esta costumbre.
Los cubanos llamamos carmelita, mientras que en los otros países de habla hispana se le llama marrón, café, chocolate, canela o castaño.
Los cubanos le hemos cambiado el nombre al color y lo tenemos tan incorporado que a mucha gente no se le ocurre pensar que pueda llamarse de otra manera. Este uso proviene de una cuestión religiosa, la influencia de la Orden de los Carmelitas en Cuba.
La Orden de los Carmelitas tiene sus orígenes en el Monte Carmelo, cerca de la ciudad Haifa. Cuenta la leyenda que el profeta Elías, orando en soledad, vio aparecer una nube cargada de lluvia que calmó una intensa sequía. Así se inicia la adoración a la Virgen del Carmen, como símbolo de amor, fe y renacimiento.
En el siglo XII fue creada la Orden de los Hermanos de la Bienaventurada Virgen María del Monte Carmelo, conocida como Orden de los Carmelitas, compuesta por religiosos católicos ermitaños, que evolucionó con el tiempo y se extendió por el mundo.
En el siglo XVI Santa Teresa de Jesús, en España, impulsó una importante reforma de la que provienen las "Carmelitas Descalzas" que se extendieron por Latinoamérica.
Los Carmelitas llegaron a Cuba en el siglo XVIII. La primera orden fue fundada en 1702 y continúan presentes en la Isla, aunque con una comunidad religiosa mucho más pequeña que otrora. Eran reconocidos entre la población por su austeridad, por su labor social y por su vestimenta.
Las ropas de esta Orden Católica son de color marrón (carmelita).