¿Por qué a las gentes brutas y tercas le llaman BURROS? De aquí surge el origen!
Habitualmente, se menciona al animal para hacer alusión a una persona que carece de instrucción o conocimientos. Esta asociación viene de varios siglos atrás.
La fama del burro como un animal con comportamiento difícil e incapaz de aprender viene de siglos atrás.
La fama del burro como un animal con comportamiento difícil e incapaz de aprender comenzó en la Grecia antigua.
Alrededor del año 600 a. C., el burro ya se trató en historias como terco, estúpido e ignorante. En una de las fábulas de Esopo –narrativas orales sobre animales con características humanas–, el animal viste una piel de león e intenta asustar a las personas, hasta que es capturado en un desliz. Posteriormente, esas historias fueron transcritas al papel y popularizadas por Fedro, en el siglo I, y por el francés Jean de La Fontaine, en el siglo XVII.
Los adjetivos que llevaron a convertir el équido en símbolo de estupidez e ignorancia empezaron a aparecer con mayor fuerza en el siglo II. La expresión “cogitatio” (razonamiento de burro en latín) formaba parte de la obra de Lucio Apuleyo, autor de El Asno de Oro (Asinus aureus), sobre un hombre convertido en burro.
Hace varios siglos atrás, ya se consideraba al burro como terco, estúpido e ignorante.
Asimismo, también se encuentra la visión utilitaria de los animales de labor. Como son animales que suelen regirse por su propia percepción, se los observa como testarudos, torpes y difíciles de enseñar.
Otro de los motivos por el cual se vincula al burro con la ignorancia
Muchas personas creen que un animal inteligente es aquel que hace todo lo que el dueño le ordena. Al asno y a la mula siempre se los comparó con el caballo, el cual es capaz de ser montado hasta con los ojos vendados y puede cabalgar hasta morir de fatiga.
Por otro lado, el burro no se va a mover si le cubrís los ojos porque éste no puede ver dónde pisa. De hecho, los burros y las mulas son preferidos como animales de carga en zonas montañosas porque toman mucho cuidado antes de dar un paso. Los caballos tienen mayor tendencia a tropezarse y romperse una pierna, ya que prestan menos atención.
Lo mismo va a ocurrir si está demasiado cansado, simplemente no va a ir a ningún lugar. A causo de eso, tienen fama de tercos o desobedientes, y muchos lo toman como falta de inteligencia.
