En todo el hemisferio occidental no hubo una ciudad más fortificada y protegida que La Habana. Su sistema de fortalezas coloniales no tiene ni por asomo, igual en toda América donde se incluyen importantes plazas como Santo Domingo, Panamá, Maracaibo, San Juan, Cartagena de Indias, Bahía e incluso la ciudad primada de los Estados Unidos, San Agustín. Las habaneras presumen de grandeza y monumentalidad. Es una muestra de en cuanto valoraba la metrópoli su perla antillana y de cuanto se esforzó en mantenerla bajo su bandera casi hasta el siglo XX.
Los Tres Reyes del Morro.
San Salvador de La Punta
San Carlos de La Cabaña.
Castillo de La Real Fuerza.
Castillo de Santo Domingo de Atarès.
La Muralla de Tierra y Mar que rodeaba toda la ciudad colonial.
Extramuros están el Castillo del Príncipe, el torreón de San Lázaro, y los castillos de La Chorrera y Cojìmar y todo el sistema de baterías que iban desde La Punta hasta el Almendares.
Ciudad muy cuidada y codiciada.
