<< La Virgen de la Caridad: aniversario 91 de un clásico del cine cubano >>
¿Sabían ustedes que hubo una película silente del cine cubano llamada «La Virgen de la Caridad»?
Este fue un filme cubano «silente de ficción» en donde se incorporaron unos discos con sonidos incidentales.
Estuvo dirigido por Ramón Peón, producido en 1930 y hace hoy exactamente 91 años (8 de septiembre de 1930) que fue estrenado en el cine Rialto de La Habana.
Estuvo interpretada en los papeles principales por Julio Gallo y Diana Marde.
Aunque fue catalogada como un verdadero acontecimiento nacional, la película apenas se mantuvo en cartelera, pues la promoción del diario «El País» no fue lo suficiente para captar la atención de anunciantes y distribuidores.
Sin embargo, la crítica y la historiografía posteriores se encargarían de concederle un lugar prominente en la producción fílmica latinoamericana de esos años resultando “la película que cerró el período silente en Cuba».
Durante un buen tiempo Ramón Peón fue ignorado, y esta cinta apenas fue considerada por quienes escribían la Historia del cine cubano después de 1959, la que descalificaba todo lo que oliese a religión.
La película narra la historia de un joven y su abuela, que son desalojados de su finca, cuando, de manera milagrosa, aparece en la propiedad escondida una imagen de la Virgen de la Caridad del Cobre.
También se entrelaza en el filme una historia amorosa.
El título estaba puesto a propósito para despistar, ya que escondía la solución de la intriga final. «La Virgen de La Caridad» era, más bien, un melodrama campesino con algo de mensaje social.
Los que la han visto saben que la trama más ingenua no puede ser.
Esto resulta interesante porque, no se trata de un filme religioso, más bien da por sentado que ese manto bienhechor ha estado y estará siempre allí, protegiendo a los cubanos de buena voluntad en cualquiera de las circunstancias en que se encuentren. A los que viven dentro de la isla o fuera de ella.
Aquí una copia del filme:
https://youtu.be/DUs8iErUwJI