Aplausos al apagón.
Tal cual aplaudimos a nuestros médicos durante meses por la labor realizada frente a la COVID, hoy los cubanos tenemos el derecho a recibir los apagones a puro aplauso de cazuelas, calderos y jarros. Es un acto de protesta de un pueblo que tiene todo el derecho a hacerlo a grabarlo y a hacer correr esas imágenes por todo el mundo.
62 años después del tergiversado triunfo de 1959, el 90% del pueblo cubano es indiscutiblemente pobre y el fallido estado «socialista» no es capaz no solo de garantizarle alimentos, medicamentos y otros bienes sino que seis décadas después ni siquiera es capaz de generar suficiente energía eléctrica!
Pues sigamos recibiendo en legítimo acto de descontento popular los apagones al alegre golpe de cazuelas, calderos y jarros. Que las imágenes le den la vuelta al mundo y se conviertan en un bochorno más que refleja la ineficacia de aquellos que dicen dirigir cuando solo actúan desde una postura poco humilde y modesta como los prepotentes potenciadores de una potencia despotenciada.
El pueblo está harto de tanta incompetencia y de tanta mentira!
Tin tan tiquiti tiquiti tan!
Manuel Viera, 6/10/21
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