De hombres bravos y valientes está hecha nuestra historia.
En 1874 mientras trataba de impedir conversaciones de paz entre cubanos y Españoles en la zona de Bayamo y Manzanillo no autorizados por el gobierno de la república en Armas, el 5 de septiembre de 1874 , Calixto García fue sorprendido con pocos hombres por una columna enemiga en San Antonio de bajas. En desigual encuentro y antes de la posibilidad de caer preso decidió suicidarse habiendo gastado toda sus municiones y con una última bala se disparó en el paladar sin lograr su objetivo.
Fue capturado por las tropas españolas gravemente herido y llevado a Veguitas, donde lo atendieron y le salvaron la vida y llevado a Manzanillo, Santiago de cuba y después a la Habana.
Informada su madre Lucía Íñiguez de que su hijo había Sido prisionero está respondió: "Ese no es mi hijo!!!" Y al informarle que antes de ser apresado intento quitarse la vida para no caer prisionero, entonces respondió temblorosa,pero convencida: AHHH……Ese si es mi hijo!!!!!!!!.