La Casa Natal de José Martí.
La vivienda está ubicada en la antigua calle de San Francisco de Paula –conocida simplemente como Paula–, en el barrio de igual nombre, y estuvo marcada en un inicio con el número 41. Pero los números han sido cambiados en varias ocasiones: así, hacia fines del siglo XIX, la casa estaba señalada con el 102; a partir de 1936, con el 214, y en la actualidad tiene el 314.
A su vez, desde 1922, el Ayuntamiento de La Habana había propuesto el cambio de nombre de la calle Paula por el de la madre del Apóstol, pero no es hasta 1950 que sucede tal sustitución. Desde entonces, la calle se denomina Leonor Pérez.
La familia Martí Pérez vivió en esta casa hasta 1856, y tras ser habitado por varios inquilinos, el inmueble pasó en 1891 a ser propiedad de las monjas dominicas de la Congregación de Santa Catalina de Sena. A ellas debió pedir permiso Leonor para efectuar el acto del 28 de enero de 1899, primer homenaje realizado en Cuba a su hijo y que sirvió para colocar una tarja en la fachada principal a nombre de los emigrados de Cayo Hueso.
Un año después, se crea la Asociación de Señoras y Caballeros por Martí, conocida como «Asociación por Martí», con el objetivo de rescatar la propiedad para declararla Propiedad del Pueblo de Cuba y dedicarla al homenaje del Héroe Nacional. Para entonces, con ese mismo fin, la emigración cubana había iniciado una colecta de fondos, que entregó a esta Asociación tan pronto se constituyó. Sin embargo, transcurrió más de una década hasta que el inmueble ostentó por fin la condición de Propiedad del Pueblo.
En un primer momento se previó que la casa acogería a doña Leonor Pérez y Cabrera, madre de Martí, quien –ya octogenaria y casi ciega– se encontraba en una crítica situación económica. Y sólo cuando doña Leonor desapareciera físicamente, el inmueble sería declarado posesión popular.
Después de vencer numerosos escollos, la Asociación por Martí logró adquirir la casa, el 14 de diciembre de 1901, y en ella se instaló doña Leonor y los descendientes de su hija María del Carmen, la Valenciana, recién fallecida. Para entonces, la única hermana de Martí que seguía viva era Amelia.En 1907 muere la madre del Apóstol, pero sólo al cabo de once años –en 1918– es que se logra retomar el acuerdo de hacer la Casa Natal una propiedad pública.El 28 de enero de 1925 se inaugura el Museo José Martí en la Casa Natal, veinticuatro años después de haber sido adquirida por suscripción popular.