Club Náutico Internacional de La Habana, instalado en la Avenida del Puerto, donde hoy existe un bar, que aflora a las aguas de esa rada.
Esa inicial organización, la fundó el Comodoro Rafael Pozo, quien a su vez dirigía el Havana Yacht Club, uno de los más elitistas de ese entonces, acompañado precisamente por el novelista estadounidense Ernest Hemingway, quien viviera en la capital cubana por 22 años.
Ese era el Club que organizaba los torneos de pesca de la aguja, que luego de varios vaivenes, se mantuvo hasta la actualidad, cuando incluso la International Game Fish Association (IGFA) lo incluye en la red de los torneos mundiales más importantes como clasificatorio.
Como dato curioso, el propio Comodoro reconoce que anualmente rondan las aguas cubanas y tocan en puertos turísticos unas 4 000 embarcaciones de recreo de las cuales el 70 % son norteamericanas.