Con su gran talento como actriz Gina Cabrera conquistó los corazones de los niños en sus numerosos programas especialmente para el público infantil por radio y TV pero, sin cámaras y micrófonos, pasaba horas en todas las fiestas del año o cuando tenía un tiempo libre, en dar amor y regalos a los niños huérfanos o abandonados en La Casa de Beneficencia y Maternidad de La Habana.
Si esos niños, hoy personas mayores supieran en las condiciones que ha vivido los últimos 30 años su madrina!.
Publicacion de nuestro amigo Rey González