Cuanta nostalgia y añoranza, estos recuerdos de mi infancia,cuando todo era bello,sano y hermoso,cuando no teníamos que pasarnos diez horas en una cola para comprar un poquito de pollo congelado y a final te digan…se acabó, cuando comíamos las frutas frescas y no tenías que escuchar al bodeguero decirte; a su niño no le tocan compotas porque cumplió tres años.Aquí termino porque tengo ganas de llorar y pensar que se me fué la niñes,la juventud y se me está yendo la vejéz esperando lo mejor,qué pena que sé que no va a llegar.