El buque más grande del mundo en su época, el “Santísima Trinidad”, fue construido en 1769 en el Real Arsenal de La Habana.
El Santísima Trinidad tenía 220 pies y 6 pulgadas (63,36 m) de eslora, 27 (7,76 m) de calado de proa y 29 pies y 7 pulgadas (8,50 m) de popa, 58 pies (16,67 m) de manga, cuatro puentes, 2153 toneladas y una tripulación de 1 115 marinos. Contó con 120 cañones en un principio, ampliados hasta 140 con posterioridad. Su construcción duró dos años de trabajo y costó 40.000 ducados, fue el buque insignia de la flota de España y el navío más grande de su época, por lo que recibía el apodo de “El Escorial de los Mares”.
Por Real Orden de 12 de marzo de 1768 el navío recibiría el nombre de “Santísima Trinidad”. En octubre del mismo año ya se le formaba la tercera cubierta, Fue botado al agua a las 11 y media del 2 de marzo de 1769.