EL MAMBÍ
Allá en el año noventa y cinco,
y por la selvas del Mayarí,
una mañana dejé el bohío,
y a la manigua salió un mambí.
Una cubana que era mi encanto,
y a quien en la noche llorando vi,
al otro día con su caballo,
buscó mis huellas y me siguió.
Aquella niña de faz trigueña,
y ojos más negros que la maldad,
unió sus fuegos a mi fiereza,
y dio su vida a la libertad.
Un día triste cayó a mi lado,
su hermoso pecho sangrando ví,
y desde entonces fue más ardiente,
Cuba adorada mi anor por ti,
y desde entonces fue más ardiente,
Cuba adorada mi amor por ti.
Autor(es): Luis Casas Romero
https://youtu.be/YZ96nQeJhIg