Hola amig@s 🙋‍♂️aquí les regalo esta super MARAVILLOSA publicación 😍 sobre:
«Fe de Vida»
Un libro en el que la escritora y poetisa cubana Dulce Maria Loynaz le rinde un homenaje postumo al hombre que dio a conocer la obra de ella – a su segundo esposo y gran amor de su vida, el cronista social de origen canario Pablo Alvarez de Cañas.

«Fe de Vida» es tambien una especie de autobiografia porque es imposible separar la vida de Loynaz de la del hombre que tanto amo…

Aqui les dejo los fragmentos finales de ese libro:

«ENVIO: Pablo, no se donde tu estas, no se siquiera si estas en algun lado. Pero, si como hasta ahora nos decian, existe una vida ultraterrena, entonces puede ser que tu recibas de algun modo sutil y misterioso, la ultima ofrenda de mi amor.

Creo que te la debia, y bien me pesa, mientras con harto esfuerzo la voy deletreando, que ella solo haya logrado hacerse viva cuando ya tu estas muerto.

Porque yo que he escrito sobre muchas cosas, solo veladamente he escrito sobre ti. Y tu merecias este descubierto homenaje de mi palabra, de esa palabra que por ti alcanzo un dia ambito y eco.

Bien esta que la diga, alguna vez, para que los que no te conocieron te conozcan, y los que te conocieron te conozcan mejor.

Te la debia ademas porque aun invisible, aun sin saberlo, yo estuve siempre en todos tus triunfos y en todas tus caidas, que es en realidad, como se debe estar en la perfecta comunion de almas.

Ya todo comprendido y todo dicho, tambien yo puedo, cuando llegue mi hora, bajar en paz al hoyo oscuro donde te dejamos aquel dia… Se que los dos no hemos vivido en vano».

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….

Cuando termino de escribir «Fe de Vida» la escritora le expreso a su amigo Aldo Martinez Malo – a quien le dedico este libro- su deseo de que solo saliera a la luz cuando ella hubiera cumplido noventa añios o despues de su muerte. El libro fue publicado en vida de Loynaz -quien murio a los 95 años en 1997.

En la imagen de la derecha se puede ver a Dulce Maria Loynaz y Pablo Alvarez de Cañas en la Mansion de la Condesa de Revilla de Camargo.

Esta fotografia me hace recordar aquel pasaje del Libro Fe de Vida de Dulce Maria Loynaz donde narra como fue que un joven Pablo Alvarez de Cañas -que aun no era su esposo- empezaba a darse a conocer en las esferas mas altas de la sociedad habanera. Esto fue en el año 1924.

«Y sucedio que una famosa condesa inmensamente rica, tuvo la ocurrencia de celebrar en su mansion del Vedado un baile de disfraz, segun la moda del Segundo Imperio…»

«Pablo no conocia mas que de nombre a esta señora y tampoco era facil el acceso a ella. No podia soñar con ser invitado a la fiesta…»

Pero el destino quiso que Pablo fuera invitado… porque estaban buscando a alguien que supiera bailar la danza de Los Lanceros que habia sido escogida para la fiesta -danza que Pablo habia aprendido en Canarias, su tierra natal.

Y fue una de las aristocratas amigas de la Condesa -que conocia a Pablo, quien le sugerio a la Condesa que invitara a este joven- desconocido por esta ultima- para que ensenara a los muchachos que iban a participar en la fiesta a bailar esta danza..

«Y asi fue en efecto. Enseno a los muchachos los graciosos arabescos de los Lanceros, tomo el te con la condesa en las tardes de los ensayos, mando hacer su disfraz, que pago a plazos, fue al baile, y casi puede decirse que lo consideraron el rey de la fiesta…»

De ahi en adelante Pablo Alvarez de Cañas se convirtio en permanente invitado a la mesa de la Condesa cuando estaba en La Habana y hasta llego a ser su companero fijo en los sonados Bailes Rojos del Country Club.

Entre comillas he puesto los parrafos tomados de Fe de Vida de Dulce Maria Loynaz.