Hoy quiero hablarles de La Orquesta Aragón.
En 1955 La Aragón, se instaló definitivamente en La Habana, contratada por la Cerveza Cristal, con objeto de grabar un programa diario en Radio Progreso. Si en un principio su repertorio estaba compuesto por danzones, boleros, guarachas y otros géneros de la música cubana, con el triunfo del chachachá, La Aragón se convirtió en la principal intérprete de este género, al que llevó a su más refinado nivel creativo e instrumental.
La Orquesta Aragón, no solo fue popular por interpretar el son y el cha cha cha, sino que también fue inspiradora del mambo. Se formó en Cienfuegos en el año 1939 y fue fundada por Orestes Aragón de profesión carpintero. Esta agrupación destacaba sus tres violines, la flauta y el cello; describiendo la música de cuerda que se tocaba originalmente en los bailes y fiestas de salones en los años 40 y 50.
En algo más de 70 años La Orquesta Aragón ha interpretado miles de éxitos como El Bodeguero, El cerquillo, Cachita, Pare Cochero, Guajira con tumbao, Tres lindas cubanas, los que no pasan de moda. La Orquesta Aragón junto con Benny Moré son el fenómeno musical más importante en Cuba en el siglo XX a mi juicio y gusto.
Junto a un fuerte movimiento cancionístico, música elaborada para cubrir las necesidades de la radio en un ambiente que resultaba similar al de otras ciudades latinoamericanas, la visita de artistas latinoamericanos principalmente de Puerto Rico, de México, Colombia y Venezuela, la difusión por la radio de canciones de Agustín Lara y María Grever, Pedro Flores, Consuelo Velázquez, Rafael Hernández, Bobby Capó, se sumaba el auge de cantantes cubanos de similares condiciones, y de autores que seguían la misma línea cancionística: Osvaldo Farrés, Pedro Junco, Bobby Collazo, Adolfo Guzmán, que interpretaban Olga Guillot, Mario Fernández Porta, Fernando Albuerne, Blanca Rosa Gil, Orlando Vallejo, y Esther Borja, que fue intérprete de Lecuona y de los autores del Teatro Lírico Cubano.
Fue la época de los iniciadores, los pioneros del “feeling”; César Portillo de la Luz, Ñico Rojas, Luis Yáñez, José Antonio Méndez, el pianista era Frank Emilio Flynn que sentaría cátedra con sus descargas y su grupo Los Amigos del cual tenía un disco que, maravilla de la tecnología, no se rayó ni gastó a pesar de que lo ponía repetidamente hasta el cansancio.
El fílin (feeling=sentimiento en inglés), que había asimilado elementos de la canción norteamericana, en ese proceso de transculturación, no desechó los valores que le dieron identidad cubana, consolidó sus elementos y, aunque tenía evidente influencia del tipo de canción del inmenso Frank Sinatra, en todo su devenir se le ha considerado una nueva expresión de nuestra canción yo diría que de las mejores.🇨🇺
Fuente: La Orquesta Aragón.
Publicación de Angela Rosa Arias