La cubana Emma Gronlier Blanco se quejó de la mala calidad del picadillo de soya que venden en las bodegas de la Isla como parte de la cuota mensual de alimentos que asigna el Gobierno a las familias. “El que se coma esto va a parar en el hospital, pero a la mayoría de los cubanos no les importa eso, pues no tienen más opciones. En Cuba no hay nada, estamos pasando tremenda hambre”, dijo la mujer en entrevista para Cubanet.
′′ Whoever eats this will stop in the hospital, but most Cubans don’t care about that, because they don’t have any other options. There’s nothing in Cuba, we’re going tremendous hunger «, the woman said in interview for Cubanet. ·