LA FORTALEZA PERDIDA DE LA HABANA.
Poco antes de la adolescencia ya, cruzábamos la bahía en la lanchita rumbo al misterio de Casa Blanca. Pocos habaneros, acostumbrados a la modernidad de calles y autos, saben que había(no sé si hay) un camino muy escarpado y difícil para llegar al Cristo entre varias casas antes de llegar a la pared de la loma y subirla, la menor distancia, solo apto para huesos y vigores jóvenes. Por ahí subíamos la pandilla. En esas fechas los muros de La Cabaña eran atemorizantes pues había custodia cerrada y sabíamos que era una tenebrosa cárcel al igual que El Morro. Años 60.
Pero un poco más allá teníamos una fortaleza ruinosa pero libre que era una delicia de aventuras con sus muros, escalinatas, fosos y los arboles que ya la invadían. Después de explorar y jugar bajábamos de la altura por los callejones de Triscornia hasta la calle Artés y al emboque para el regreso a la ciudad de enfrente. Por diez centavos o colados bajo el torniquete.
Nunca supimos la historia tras las ruinas hasta muchísimos años después. Era el llamado Hornabeque de San Diego.
Hornabeque es según Google una fortificación auxiliar de otra principal.
En este caso San Diego se construyó en 1780 a unos 1000 metros del ala noreste de La Cabaña y a 50 metros de altura con el objetivo de garantizar ese flanco débil y para dirigir la artillería y alejar la del enemigo. Los detalles de su construcción están disponibles en la red. Era una fortaleza magnifica en su tamaño y diseño con sus murallas, fosos, puente y edificios interiores. Con troneras para 25 cañones. Vean su importancia en el esquema. Sin idea de cómo está hoy día o si hay algún plan de recuperación. Difícil.
