La tarea de desordenamiento.
Los ahorros en dólares de los ciudadanos cubanos, depositados en bancos, se han convertido en moneda nacional por obra y gracia de la Tarea de desordenamiento. Los cuentapropistas, médicos y trabajadores en el exterior, además de todo aquel ingenuo que confió sus ahorros a los bancos cubanos, han visto desaparecer sus esfuerzos de años en un abrir y cerrar de ojos. Cabe pues preguntarse ¿Qué motivará entonces a los trabajadores, médicos y cuentapropistas, depositar en bancos cubanos sus esfuerzos para que se los robe la revolución?.