María Félix, la actriz mexicana deslumbró a La Habana el 26 de octubre de 1949…
Tal fue su recibimiento que, a poco de su llegada, exclamó asombrada: «Yo tenía referencias de cómo me querían en La Habana pero lo de esta tarde ha sido más de lo que esperaba». Desde el avión hasta el automóvil que la condujo al Hotel Nacional, hubo necesidad de ponerle protección policial, pues el ímpetu de sus admiradores amenazó con perturbar la integridad física de la estrella. Se cuenta que algunos hasta le halaron el vestido para guardar un recuerdo de María Bonita.
En el verano de 1955 regresó a La Habana convertida en una estrella de fama mundial. En esta ocasión actuó en la pista del cabaret Montmatre y en el escenario de Radiocentro.