No puedo precisar la fecha en que nací pues por más que busqué personalmente la partida de bautismo en los libros de mi parroquia, no pude dar con ella […] Pero por la edad precisada en la fecha de nacimiento de contemporáneos míos, y por la tradición conservada en la memoria de mis buenos padres, pude averiguar sin más datos que nací allá por el año 1836.
En cuanto al mes, día y hora, siempre he lamentado ignorar tan preciosos datos para mí, que señalan los primeros instantes en que aparecemos casualmente a ser miembros de la gran familia humana. Vine al mundo y fue mi cuna un pueblecito ribereño del Banilejo (entonces sería un caserío), que le da su sombra: Baní, tierra de los hombres honrados y de las mujeres bonitas y juiciosas. (Notas autobiográficas de Máximo Gómez, 1894)