¿Sabes quién fue el pirata más temido en La Habana?
A mediados del siglo XVI, rondaba por las aguas del Atlántico un pirata que, con solo ser nombrado, provocaba un miedo indescriptible en las colonias españolas, entre ellas Cuba. Cada vez que partía a Europa, se calculaba la cantidad de tiempo que le tomaría volver a estar cerca de La Habana. De esta forma, se preparaban todas las fuerzas y se destinaban los recursos disponibles en defensa del puerto.
La razón es que en aquellos momentos el puerto constituía un importante centro económico en el Caribe. Por ende, era de gran relevancia mantenerlo a salvo.
El terror de los mares
La figura de este pirata se utilizó en los cuentos de la época para aterrorizar a los niños; pero esto también ocurría con los soldados. Si alguien mencionaba que el pirata planeaba atacar La Habana, los ibéricos comenzaban a preparar la ciudad para la ofensiva, sin siquiera comprobar la veracidad de la fuente.
No se trata de menoscabar a los españoles y tomarlos como sujetos despavoridos, porque no lo eran; se trata de mostrar el pánico que suscitó Francis Drake, el pirata inglés, en todas Las Antillas, condición que dio origen a su sobrenombre: “el terror de los mares”.
En el período transcurrido entre 1565 y 1595, se convirtió en la figura más temida en las posesiones españolas. Su fama no era producto de una mera invención, pues, además de la cuantiosa flota con la que contaba, había llevado a cabo saqueos en Santo Domingo y Cartagena de Indias, de los que salió prácticamente ileso. Su muerte, que ocurrió a los 56 años de edad, no fue a causa de una batalla, sino producto de haber contraído disentería.
Ningún pirata había causado tanto temor hasta entonces
La metrópoli española se obsesionó con salvaguardar La Habana y fortalecerla para así poderse defender de un futuro ataque, que jamás sucedió. Muchos afirman que gran parte de las fortificaciones que se alzaron en esta época, representaron un monumento a su persona, pues ningún pirata había causado tanto pavor en aquellos primeros años del colonialismo en Cuba. Por esta razón, la construcción del Castillo de la Real Fuerza tuvo que ser apresurada, pues no se contaban con estructuras suficientes que aseguraran la defensa del puerto.
Aunque la muerte de Francis Drake no significó el cese de las agresiones de la Corona Británica hacia las posesiones españolas, sí representó la caída de toda una leyenda. Sin embargo, años después de su fallecimiento, resultaba común escuchar su nombre por parte de viajeros y cronistas.
Dos siglos más tarde, todos los temores y presagios de los ibéricos se cumplieron. Inglaterra logró hacerse con La Habana, dando paso a once meses de colonialismo británico en esta ciudad. De esa forma, los ingleses se fueron erigiendo como una fuerte potencia naval que, además de contar con una extensa flota, contrataba a temidos piratas para que actuaran en función de sus intereses. Además, les otorgaban patentes de corso para legitimar sus ataques en el Caribe colonial.
Fuente: https://www.todocuba.org/quien-fue-pirata-mas-temido-la-ha…/