¿Sabias Que? El Capitan Mambi José Tolón era chino y declino humildemente el derecho que tenía de ser presidente de la república cubana.
Por los servicios prestados a la causa de la liberación de Cuba durante diez años o más, en el artículo 65 de la constitución de 1901. Se les concedió el privilegio de ser presidentes de la república a El Capitan Mambi José Tolón al teniente coronel José Bú, amigo personal de Gómez y los dos declinaron humildemente el reconocimiento.
Mucho se ha escrito sobre nuestras guerras por la independencia de España. Casi siempre se asocia a los hacendados y campesinos blancos criollos y a los negros esclavos como a los mambises que se lanzaron a la manigua a pelear por la libertad de Cuba. Y es cierto, pero no se menciona a los cientos y cientos de chinos mambises que desde el Grito de Yara lucharon y murieron por la misma causa.
Calixto García, Ignacio Agramonte y otros generales mambises tuvieron bajo su mando batallones de soldados chinos. Cuatrocientos chinos pelearon bajo las órdenes del general Thomas Jordan en la expedición del vapor Perrit. En la guardia personal del general Antonio Maceo había oficiales chinos y en la famosa batalla de las Guásimas, frente a tres mil soldados españoles se enfrentaron mil doscientos mambises, de los cuales quinientos eran chinos.
Durante la Guerra Chiquita el mayor general Francisco Carrillo tuvo en jaque a las tropas españolas en la provincia de la Las Villas. El general español Callejas, que operaba en ese territorio, llegó a exclamar en forma despectiva que "con cuatro negros y veinte chinos" Francisco Carrillo se mantenía en pie de combate en las zonas de Sagua la Grande, Remedios, Cifuentes, Corralillo y los Quemados, e incluso hacía incursiones por Cienfuegos. La presencia de los chinos en las tropas mambisas fue tan importante que el gobierno español llegó a imprimir pasquines llamando a la rendición en cantonés 古巴華人 = Chino cubano y en castellano.
Nuestro apóstol José Martí Refería en un artículo: “(…) eran grandes patriotas; no hay caso de que un chino haya traicionado nunca: un chino, aunque lo cojan, no hay peligro: “no sabo”, nadie lo saca de su “no sabo”. [Patria, 28/11/1893, T. IV O.C. José Martí, Pág. 260. La Habana, 1972]
Precisamente el periódico Patria, en 1892, dio a la luz un extenso artículo de Gonzalo de Quesada, discípulo y albacea de Martí, donde narró el bregar de los chinos tanto en la contienda del '68 como en la denominada guerra chiquita. Ese texto podemos consultarlo en su libro Mi primera ofrenda y constituye todavía una fuente imprescindible acerca del tema.
Según este autor, los chinos se sumaban espontáneamente a las tropas insurrectas (…) y después se introducían con habilidad en las ciudades para reclutar entre los de su raza, sin que las autoridades pudieran reconocerlos, por lo difícil de distinguir los unos de los otros.
Cuando las fuerzas cubanas sublevaron las dotaciones de los ingenios, los oficiales de su raza les explicaron el porqué de la guerra, y juraron llenos de entusiasmo servir a la República.” [Gonzalo de Quezada, citado por Juan Jiménez Pastrana: Los chinos en la historia de Cuba, 1847-1930. Ediciones Políticas, La Habana p. 85]
Honor y Gloria a todos estos héroes de nuestra independencia que han sido olvidados en la historia.