Sonia Calero Castilla (1936). Importante bailarina cubana.
Nacida en La Habana el 21 de agosto de 1936, Sonia Calero mostró desde pequeña dotes excepcionales para el baile popular y la danza en general. A los once años de edad matriculó la especialidad de ballet en el Conservatorio de La Habana, donde comenzó estudios con el maestro Alberto Alonso, después íntimamente ligado a su vida profesional y personal.
En el verano de 1950 debutó en el teatro Auditorium -hoy teatro Amadeo Roldán-, con el Ballet de la Sociedad Pro Arte Musical, y más tarde se incorporó como miembro estable al llamado Ballet Nacional que fundó en el mismo año Alberto Alonso, en el cual el maestro comenzaría a desarrollar experimentos coreográficos, transmitiendo los ritmos y bailes populares al lenguaje del ballet.
Sin embargo, la entrada de Sonia Calero en el Ballet CMQ Televisión significó su verdadero debut profesional, y fue ese medio el que le dio la popularidad que ha mantenido durante toda su carrera. De la mano de su maestro integró en la década de 1950 otras agrupaciones danzarinas como el Conjunto de Bailes del Teatro Radiocentro, y realizó presentaciones en diferentes cabarés capitalinos.
Su repertorio de entonces no sólo fue amplio, sino también variado en estilos. Incluía, desde obras académicas como Concerto, hasta piezas de estilo neoclásico, experimentales y de ambiente popular. Entre estas últimas se destacaron sus interpretaciones de las viñetas creadas por Alberto Alonso para televisión y espectáculos musicales en teatros y cabarés. Títulos como La calle, Quimbisa, La guagua o La mujer de Antonio, El muerto se fue de rumba, El güije y El solar, mostraban profundo arraigo en la tradición cultural cubana.
Durante su larga carrera en la televisión, Sonia Calero formó pareja con bailarines clásicos como el uruguayo Víctor Álvarez y el cubano Luis Trápaga, además de actuar junto a muchas celebridades del canto y la actuación en Latinoamérica, entre ellos el tenor Pedro Vargas y el cómico Mario Moreno, Cantinflas.
La rebambaramba, ballet compuesto por Amadeo Roldán, fue estrenado por la televisión cubana en 1957 con la interpretación de Sonia Calero y el Ballet de CMQ Televisión y la coreografía de Alberto Alonso, en lo que constituyó un momento significativo en la carrera de la artista.
En 1966, igualmente bajo la dirección de Alonso, Sonia Calero integró el elenco del Teatro Musical de La Habana, donde se destacó como actriz y bailarina en la interpretación de comedias musicales cubanas. En esa compañía fue relevante el estreno, en 1966, de Mi solar, con música de Tony Taño y libreto de Lisandro Otero, que tenía como antecedente la viñeta El solar, de 1953. Mi solar fue el más exitoso espectáculo musical cubano de la década, y uno de los más recordados del género. Su trama, que desarrolla un triángulo amoroso dentro de un solar habanero.
A pesar de su amplia ejecutoria, las particularidades del baile de Sonia Calero y las coreografías de Alonso han dejado muy pocas imágenes para la historia, por la escasez de soportes fílmicos.
En esa antológica coreografía de La Rumba, la Calero desarrollaba un baile provocativo llevado hasta sus más insospechados límites, pero nunca fuera de las fronteras que convierten un baile popular en arte.
Tanto con el Ballet Nacional de Cuba como con el Conjunto Experimental de Danza, y también en actuaciones especiales, Sonia Calero recorrió buena parte del mundo, desde Estados Unidos hasta Rusia, pasando por México, Alemania, Checoslovaquia, Hungría, España, Bélgica, Holanda y Canadá, entre otros países.
La pareja que integró con Alberto Alonso trascendió los límites de la relación conyugal por más de tres décadas, para crear una dupla inseparable en el plano artístico. Primero como alumna, después como bailarina y finalmente como esposa, Sonia Calero fue la musa inspiradora muchas de las piezas que rebasaban estas expectativas y tuvieron otras intérpretes reconocidas en el mundo de la danza, también fueron creadas pensando en ella.
En 1994 Sonia Calero se radicó junto a su esposo en Estados Unidos, donde ambos impartieron cursos y talleres en diferentes universidades, escuelas y academias. En particular se destacó su labor en el Santa Fe College de Gainsville, ciudad donde falleció Alonso el último día del año 2007.
Sonia Calero continúa bailando en actuaciones especiales, homenajes y presentaciones, como artista invitada. Su presencia es requerida en los montajes de obras de Alberto Alonso que se realizan internacionalmente, en especial del ballet Carmen, por ser fiel conservadora del legado de su esposo, el más importante coreógrafo cubano.